Disfrutar de un buen whisky y de un tabaco de calidad son dos alternativas gratificantes para quienes gustan de ellas, con el beneficio adicional de que combinadas ofrecen aún mejor experiencia.
Cómo elegir el whisky ideal para maridar con tabaco
Lo primero a la hora de elegir qué maridar con tabaco es la bebida en cuestión. En general, el ron añejo y el whisky escocés son las dos mejores opciones.
La cerveza, los vinos espumosos y, sobre todo, el cava o el champán, deberían descartarse porque el gas carbónico a baja temperatura afecta al sabor que deja el cigarro, privándole a quien lo disfruta de muchas de sus características naturales.
Dentro de los whiskys, lo ideal es optar por aquellos que presentan una gran intensidad de sabor y aroma, para compaginar perfectamente con el toque de tabaco.
Los mejores tabacos para acompañar tu whisky favorito
Aquí la preferencia será totalmente subjetiva. Realmente cualquier tabaco que sea de tu agrado acogerá el whisky como un catalizador de sus sensaciones.
Si puedes elegir, los habanos consiguen la mejor fusión de notas olfativas y gustativas, en total equilibrio y armonía entre estos dos ingredientes.
Pasos para disfrutar al máximo de un maridaje de whisky y tabaco
Para disfrutar todo lo posible de un perfecto maridaje de whisky y tabaco, la elección de ambos debe ser acertada y acorde totalmente a tus gustos personales.
Pero la comida que hayas tomado también va a condicionar la experiencia, sobre todo teniendo en cuenta que ambos suelen tomarse después de una velada gastronómica.
Deja que la elección de alimentos influya en tu combinación final de whisky y tabaco. Si has optado por platos muy elaborados y de fortaleza considerable, puedes elegir una bebida más suave y/o un tabaco menos intenso.
Pero si la comida no destaca por su agresividad natural, sino que ha consistido más bien en alimentos de poca intensidad, entonces deriva el protagonismo al whisky más potente y al tabaco más atrevido, que te proporcione bocanadas de aroma considerable.
Cuidado aquí con los postres. Un acabado demasiado dulce podría llegar a condicionar todas las sensaciones. El amargor natural del café, sin embargo, ayudará a canalizar mejor los sabores de tu whisky y tabaco preferidos.
Experiencias únicas: eventos de maridaje de whisky y tabaco
El maridaje de whisky y tabaco es cada vez más buscado por quienes disfrutan con esta combinación, hasta el punto de que se organizan eventos exclusivos en este sentido.
Si priorizas el whisky, te recomendamos una cata de las mejores elaboraciones, que puede terminar con una variedad de tabacos muy sugerente.
Si optas más por lo segundo, numerosos clubes para fumadores organizan este tipo de reuniones, con el whisky como acompañante entre otras bebidas, ya que son conocedores de la buena sintonía que consiguen ambos.
En todas estas ocasiones, una regla está clara y es que en elaboraciones artesanales de este calibre, la calidad también debe ser un requisito que debes escoger, para disfrutar como nunca de cualquiera de ellos.